Ocho años después de su alumbramiento, el T-Roc estrena su segunda generación. Con él Volkswagen estrenó su tridente de ataque en el segmento de los crossovers urbanos que entonces parecía la enésima derivación de los SUV. Hoy, esa categoría representa el 26% de las ventas totales en España (segundo de más peso) y el T-Roc es, nada más y nada menos, que el SUV de talla compacta más vendido en Europa superando, además, los dos millones de unidades fabricadas para todo el mundo. Hoy, más que nunca, ese triángulo que completan el T-Cross y el Taigo tiene más sentido y vigencia que nunca.
Y en ese contexto el T-Roc viene a echar más leña sin perder del todo ese toque ‘indie’ (de independiente) que tuvo el original de 2017. Nos referimos al gran signo distintivo: su cuarto trasero con aires coupé y con su voluminoso pilar C ribeteado, como el techo, mediante una moldura gris. Limpia su frontal al adaptarlo a esa nueva línea de diseño influenciada por la gama eléctrica y que ya habíamos visto en los Tiguan y Tayron. Esto implica la desaparición de las luces diurnas encastradas en el paragolpes para integrarse, como los demás Volkswagen, en las ópticas principales.
Los pilotos de la zaga también se homologan con el resto de la gama actualizada, aunque eso le permite disponer de la barra transversal led con el logo iluminado en rojo. A propósito de las luces, en el frontal los faros led son de serie y en los acabados superiores los LED Plus se conectan el emblema mediante una estrecha tira luminosa de color blanco. Las líneas más limpias y ese nuevo frontal le proporcionan una mejora de un 10% en su coeficiente aerodinámico (0,29 Cx) muy útil en las versiones electrificadas.
Cuestiones de diseño al margen, esa electrificación es el gran paso que el nuevo T-Roc aporta a esa subgama crossover urbana de la marca. En esta primera fase de comercialización que ha arrancado ya hay versiones microhíbridas (mHEV) con batería de 48V asociados al motor 1.5 eTSI y potencias de 115 y 150 CV y transmisión automática de doble embrague y siete velocidades. Según el importador de la marca para Canarias, será en el último tercio de 2026 cuando lleguen las versiones ‘full hybrid’ con un sistema de propulsión híbrido desarrollado desde cero. Habrá versiones 2.0 TSI microhíbridas con tracción total 4Motion y también se ha confirmado que se mantendrá la versión R como la más prestacional de todas.
Las líneas más limpias le proporcionan una mejora de un 10% en su Cx
A efectos prácticos, es importante que la segunda generación gana 12 centímetros de longitud, lo que ha de repercutir necesariamente en el confort de las plazas traseras, algo que siempre está en el debe cuando se traba de modelos que encajan en la horma del segmento B. El maletero gana 30 litros de volumen de carga alcanzando los 475 litros. Aunque lo que más pone en valor la marca al hablar del interior del T-Roc de 2026 es que ha incrementado la calidad percibida, aunque lo ha hecho, de nuevo, simplificando los elementos que lo forman. El cuadro de instrumentos digital es el mismo del Tiguan y el Tayron y a su lado hay una nueva pantalla de infoentretenimiento de 12,9 pulgadas con el último software del fabricante alemán. El salpicadero cuenta ahora con una sección tapizada que, junto a la iluminación ambiental, le da un necesario toque de sofisticación.
En asistentes el cambio generacional –y el hecho de emplear la plataforma modular MQB Evo del grupo– le permite disponer del Travel Assist con cambio automático de carril y mayor anticipación a los límites de velocidad; el Park Assist Pro con función de memoria para un aparcamiento totalmente automático en distancias de hasta 50 metros; y, como opción, el sistema de aviso de salida para advertir de vehículos o bicicletas que se acercan por detrás al abrir las puertas.
En nuestro mercado los acabados son los Life, Style y R-Line. En cuanto a colores, en toda la campaña de comunicación del nuevo modelo es omnipresente el color ‘Amarillo Canario’ (denominación oficial de la marca alemana), pero hay otros con el mismo ‘rock and roll’ como el Rojo Fuego, el Azul Celestial (como el de las fotos que ilustran este reportaje), Gris Ceniza, Negro Granadilla y Blanco Puro. Existe, además, la opción de acabado bicolor con el techo en negro.
